el peso de la mañana, a las ocho
en la calle mamarracheada, mamada.
la boca abierta y la cabeza tirada en un colectivo,
media hora fisura en el transporte público,
en el cordón de la vereda.
colgué las llaves, va a haber que tocar el timbre
las cuadras siguen y la calle sigue siendo una mierda.
cada tanto un tipo aparece en la vereda de enfrente
o pasa un auto con la cumbia al palo, mientras
el calor
te quema la cabeza quemada.
1 comentario:
La demeure d'un ciel .
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